domingo, 1 de septiembre de 2013

Preocupa a empresas y sindicatos que se niegue a UPM producir más

Diario El País. 31/8/13

Los transportistas, los productores forestales, los trabajadores de la madera y la Cámara de Industrias advirtieron sobre las consecuencias muy negativas de que no se acceda al pedido de UPM para incrementar su producción de celulosa.

La detención de actividades se adelantó y podría ser más prolongada si no sube la producción. Juan Pablo Correa

La inquietud por la negativa del gobierno a autorizar a UPM incrementar su producción de 1,1 a 1,3 millones de toneladas de celulosa había sido motivo de conversación el lunes 26 entre directivos de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU) y dos directivos de UPM. Y la preocupación volvió a ser planteada el martes 27 por directivos de la gremial industrial al prosecretario de la Presidencia, Diego Cánepa, y al ministro de Industria, Roberto Kreimerman, con los que coincidieron en oportunidad de la inauguración de la nueva planta de desulfuración de Ancap en La Teja. Al acto asistió la presidente argentina, Cristina Fernández, que vino acompañada de un grupo de militantes de La Cámpora, la juventud kirchnerista.

Ahora, la inquietud se extiende a todo el tejido vinculado a la planta. UPM confirmó el viernes que cerrará sus instalaciones para tareas de mantenimiento a partir del 14 de septiembre y que reabriría el 25 de septiembre solamente en caso de que se le permitiera incrementar en 200.000 toneladas su producción anual, pedido al que el gobierno no accedió. En este nuevo escenario, la fábrica reabriría recién en noviembre.

Javier Carrau, presidente de la CIU, dijo a El País que "pensábamos que la decisión iba a ser otra, no es momento para paralizar nada".

"Si Argentina no hizo problemas, no se entiende la decisión. Esto afecta a mucha gente, a 5.000 o 6.000 personas", comentó. "Nos sorprende y esperemos que se esté a tiempo de un cambio. Esto son jornales y fletes que se pierden y no se recuperan. Y esto asusta un poco a los inversores", agregó.

Mauricio Mendy, secretario de la Asociación del Transporte de Carga Forestal, contó a El País que hace seis años que trabaja con UPM entregándole madera para pulpa de eucaliptus grandis y globulus, y que la considera una empresa "exigente pero de primer nivel, ojalá hubiera más como ella".

"Somos de la idea de que esto sería muy negativo en todo el interior para chóferes, gomerías, mecánicos. Hay localidades pequeñas como Arévalo, en Cerro Largo, o Algorta y Paso de los Mellizos, en Río Negro, en el interior profundo, que han tomado vida por la planta de UPM", advirtió.

Todos los años, la planta cierra algunos días para tareas de mantenimiento. El cierre se producía habitualmente en octubre pero este año se adelantó. Es que a UPM le van a "sobrar" dos meses durante los cuales permanecerá ociosa porque no está autorizada a producir más de 1,1 millones de toneladas de celulosa anuales (a los que ya llegó). Por ese motivo, pidió al gobierno elevar el tope a 1,3 millones.

Entre 600 y 700 conductores de camiones se verían afectados si no se accede a su solicitud, dijo Mendy. Por cada camión se pagan US$ 10.000 por mes de gasoil y US$ 300 de peaje, mencionó. Y es un sector con jornales relativamente elevados, agregó.

"Nosotros seguimos pensando en el mejor escenario porque al otro, al del cierre más prolongado, lo vemos nefasto. Y le seguimos jugando una ficha al gobierno en esto", dijo Mendy. Su gremial va a plantear el asunto a la Intergremial del Transporte de Carga si la decisión oficial sigue firme.

La inquietud se extiende a los productores forestales. El presidente de la Sociedad de Productores Forestales, Atilio Ligrone, dijo a El País que hay vinculadas a UPM 600 empresas de todo tipo. "Es un actor muy importante que recibe el 40% de la madera de Uruguay. Cualquier problema que tenga, pasa al resto. Dos meses detenidos es muchísimo", advirtió. Ligrone cree que un eventual aumento de la producción incrementaría las exportaciones de UPM en US$ 100 millones.

Y la preocupación llega también a los sindicatos. Fernando Oyanarte, secretario general del Sindicato Obrero de la Industria de la Madera y Anexos (Soima), explicó que solamente unos 200 o 300 trabajadores (personal propio de UPM o empleados de empresas formales altamente mecanizadas) tendrían cobertura de seguro de paro en caso de que planta deba cerrar más tiempo de lo normal.

Hay cientos de trabajadores que son tomados por contratistas a término y que no tienen cobertura ni parcial ni total, explicó el sindicalista. Estos trabajadores, en turnos de 12 horas diarias, pueden llegar a percibir $ 30.000 mensuales, detalló. El sindicato quiere que se pase a tres turnos de 8 horas pero, admitió Oyanarte, a veces los propios trabajadores se oponen a esa posibilidad porque creen que bajaría su remuneración.

El Soima analizará hacer un planteo conjunto con los trabajadores papeleros por la situación en UPM. Oyanarte reconoció que la planta ha incrementado su eficiencia, ha cumplido sus metas de producción y contaría con la materia prima necesaria si su planteo fuera aceptado. "Cuando los precios de la celulosa estaban bajos, retacearon la producción, pero ahora los precios están arriba", dijo. Hay 23.000 trabajadores vinculados a la industria forestal.

Jorge Rucks, director de la Dirección Nacional de Medio Ambiente, adelantó que no tendría un efecto negativo subir la producción. La solicitud se hizo en 2011 en UPM.

LO QUE DEJARÁ EL PARATE

1.Transportistas perjudicados

350 camiones por día son los que ingresan con materia prima a la planta de UPM.

2.Empresas de transporte

Son 40 las firmas vinculadas al transporte de madera para la fábrica de celulosa.

3.Combustible: uso de gasoil

Cada camión que lleva madera requiere alrededor de US$ 10.000 mensuales de gasoil y US$ 300 de peajes.

4.Madera para industria

UPM recibe alrededor del 40% de la madera de uso industrial producida en el país.

5.Producción anual

UPM pretende incrementar su producción anual autorizada de 1,1 millones de toneladas de celulosa a 1,3 millones para reducir el tiempo ocioso de su planta.

6.Trabajadores afectados

Unos 300 trabajadores de la cosecha forestal tendrían cobertura de seguro de paro en caso de que la planta deba permanecer cerrada por no poder aumentar su volumen anual de producción de celulosa. Cientos trabajan a término para contratistas sin esa cobertura.

7.Materia prima

Si la planta debe permanecer más tiempo cerrada, dejarán de procesarse y transportarse 700.000 metros cúbicos de madera.

8.Mantenimiento industrial

En las tareas de mantenimiento trabajarán alrededor de 600 personas, de las cuales 530 son uruguayas y 70 de Argentina, Brasil y Europa. Más de 50 empresas locales participarán de los trabajos que consistirán básicamente en tareas de mecánica general, lavado de equipos y soldaduras especiales, informó la empresa. La empresa también advirtió, en un comunicado, que puede haber "episodios de olor" sin consecuencias para la salud humana.

9.Proceso ante la CARU

El pedido para producir más tiene el visto bueno de la Dirección Nacional de Medio Ambiente pero está a estudio de la Comisión Administrativa del Río Uruguay. Está corriendo un plazo que vence el 15 de septiembre que tiene Argentina para hacer objeciones en el seno del organismo. Vencido ese plazo, sin que se reciban reparos, Uruguay podría acceder unilateralmente al pedido de la compañía pero no lo hará. Argentina dejó entrever que no tomará decisiones sobre temas bilaterales con Uruguay hasta después de las elecciones parlamentarias del 27 de octubre.

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